Tarta de manzana de "la abuela"

Buenos (y calurosos) días a todos!

¿Cómo lleváis estos últimos días de mayo? En mi caso (y como pasa la mayoría de los finales de primavera) tengo sentimientos contradictorios. Por un lado, me da pereza que los termómetros empiecen a coger color y comiencen los indeseables y calurosos días de verano (sí, aguanto mejor el frío, qué le vamos a hacer) y, por lo tanto, empiezo a echar de menos los días de invierno de manta, peli y palomitas. Pero por otro lado, cuando las temperaturas van al alza, me alegra muchísimo poder hacer una cosa en concreto:  salir por la tarde o por la noche a tomar una caña y unas tapitas en una buena terraza (¡ay, las terrazas! ¡Qué haríamos los españoles sin ellas! Para mí, lo mejor del verano), y más viviendo en una ciudad donde las tapas son, por decirlo de alguna manera, fuera de serie.

El otro día estaba teniendo uno de esos días en los que no quiero para nada que haga calor. Y por ello, me dispuse a hacer algo que, si bien no fuese super elaborado y me llevase horas y horas en la cocina, me recordara y transportara a esos días en los que comienza a hacer fresquito en otoño y apetece meterse en la cocina y hacer bizcochos (uno, que es muy otoñal). Y... ¡BOOM! Me vino a la cabeza la tarta de manzana, que yo llamo, "de la abuela". ¿Por qué ese nombre? Porque es la típica receta de tarta de manzana que muchas de nuestras abuelas (no la mía, en este caso) o madres saben hacer. Sí, de estas típicas de las medidas de un vaso que son a prueba de bombas y siempre salen bien Y es que es muy, pero que muy sencilla, pero el resultado es muy rico. Solo hay que batir todos los ingredientes, decorar con unas rodajas de manzana, al horno... y, ¡listo! Nada de florituras, ni manzana pochada en mantequilla durante horas, ni hojaldre, ni cremas pasteleras... Una receta sencilla, tradicional y rica. ¿Qué más queremos? ;)

TARTA DE MANZANA "DE LA ABUELA"

INGREDIENTES (tomando como medida un vaso de 300 ml):

- 4 manzanas "golden" medianas (2 para la tarta y 2 para decorar)*
- 1 vaso de leche entera o semidesnatada
- 2 vasos de harina
- 1/2 vaso de azúcar blanco
- 1/2 vaso de azúcar moreno
- 4 huevos
- 1 sobre de levadura química
- 1 cucharadita de canela (opcional)
- 1 pellizco de sal
- 2 ó 3 cucharadas de mermelada de melocotón (o al gusto)

*Podéis usar las manzanas que queráis o las que tengáis por casa. En mi caso, creo que la golden, por textura y sabor, es la que mejor le va a esta tarta.


ELABORACIÓN:

1.- En primer lugar, precalentamos el horno a 180º C, sin ventilador y con calor arriba y abajo, y untamos un molde para tarta con mantequilla y con harina para evitar que se pegue la tarta.

*TIP: la mezcla de la tarta da para un molde de unos 30 cm de diámetro y unos 4 ó 5 cm de alto. Si no tenemos un molde tan grande, podemos dividir las cantidades o hacer dos tartas. Dos mejor que una, ¿no? ;)

2.- Pelamos y descorazonamos las dos manzanas que van en la tarta. Cortamos en trozos de un par de centímetros y añadimos un chorrito de limón para que no se oxide la manzana.

3.- En el vaso de la batidora o en una picadora grande añadimos la manzana troceada, la leche, la harina, los dos tipos de azúcar, los huevos, la levadura, la sal y la canela. Vamos, todos los ingredientes menos la mermelada. Trituramos bien durante unos 3 ó 4 minutos o hasta que esté todo muy bien integrado y no haya grumos. Tiene que quedar una mezcla espesa, no muy líquida. Vertemos la mezcla en el molde y reservamos.

4.- Mientras tanto, pelamos y descorazonamos las manzanas restantes y las cortamos, en este caso, en rodajas de medio centímetro de grosor. Ni muy finas ni muy gruesas, ya que en el horno perderán volúmen. Cubrimos la superficie de la tarta con las rodajas de manzana, intentando solapar una con otra, hasta que esté cubierta. Recordad que, si no queda perfecta, no pasa nada. Esa es la belleza de las tartas caseras. :P

5.- Metemos al horno previamente precalentado durante unos 50-60 minutos. Cuando hayan pasado 50 minutos, pinchamos con un palillo y si sale limpio, la tarta está hecha. Si no, la vamos comprobando cada 5 minutos hasta que esté hecha.

6.- Cuando saquemos la tarta, y en caliente, pintamos toda la superficie con generosa mermelada. De esta manera, la manzana quedará brillante, se conservará mejor y dará más sabor a la tarta. Finalmente, dejamos enfriar durante un par de horas en la nevera y servimos.

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Y ¡listo!, ya tenemos una deliciosa tarta de manzana casera para devorar. Como os he dicho, es la típica y tradicional tarta de manzana que se hace en un santiamén, fácil, resultona y que nos puede sacar de un apuro en cualquier momento. El resultado es, bueno, ¿quién no ha probado este tipo de tartas? Queda jugosa, al estilo de un bizchocho denso, con un buen sabor a manzana y, teniendo en cuenta que eso de la decoración no es lo mío, queda bastante presentable. Así que, ya sabéis, si os quedáis sin ideas para el postre, si el postre que habíais preparado ha salido mal, o si queréis hacer algo rápido y con buen resultado, mejor que tengáis esta receta en la recámara. Ya me lo agradeceréis... ;D

Y hasta aquí la receta de hoy. Recordad que podéis seguirme en la cuenta de Twitter @mediterraneaco y en la página de Facebook para enteraros de las novedades del blog y de las últimas recetas que he ido subiendo.

Un saludo, hasta la próxima receta y... BON APPÉTIT!! :)