Hoy vamos a trasladarnos a la France. Nuestro querido y adorable vecino es, a gusto de la mayoría de la gente, un grande en la cocina. Su cuisine ha inspirado a cocineros y chefs de todo el mundo y ha traspasado fronteras y países con sus elaboraciones, ingredientes y platos típicos que se han hecho un hueco en las cartas de nuestros restaurantes.
La gastronomía francesa se caracteriza por ser muy variada regionalmente. Si nos movemos desde las regiones del norte hacia abajo, veremos que nos trasladamos desde ingredientes más "europeos" como la mantequilla, la nata o la creme fraîche, hasta ingredientes más "mediterráneos" (tirando pa' lo nuestro) como el aceite de oliva, las aceitunas, las hierbas aromáticas, etc.
Además, se puede considerar como cuna de la alta cocina, siendo considerada como refinada y "pija" en muchas ocasiones. La verdad, es que la concina francesa, con sus particulares elaboraciones y procedimientos culinarios, se ha convertido en una fuente inagotable e imprescindible de ideas para todos aquellos que quieren aprender a ser un buen chef (fijáos en la peli Julie and Julia de Meryl Streep para ver esto último que comento).
Y es por todo esto que hoy os traigo un clásico de la repostría francesa que encanta a todo el mundo: el brioche. El brioche, también conocido como bollo de leche, pan de yema o suizo, es un pan típico francés cuya masa se realiza a base de harina, huevo, azúcar, levadura de panadero, mantequilla, leche y sal. Todos estos ingredientes nos aportan un pan tierno, con un sabor de muerte, y una textura que encanta. Y es que ¿quién no se ha fijado en esos panes en forma de trenza (unos más industriales que otros), brillantes por fuera, tiernos por dentro, con azúcar (o no) por encima, y que huele a gloria? La boca agua...
Sin embargo, la receta original no es lo que se puede llamar fácil. En verdad es costosa y larga. Muy larga. Algunas elaboraciones tradicionales de brioche requieren amasados específicos, otras largos periodos de fermentación o masas madre que, para elaborar a modo casero en nuestra cocina, son, en mi humilde opinión, un tanto complicados. Por eso, durante un tiempo, he estado probando maneras de aligerar, facilitar y acortar el proceso y, finalmente, os traigo mi receta de brioche. Una receta muy sencilla que, si seguís los pasos (muy fáciles, por cierto) que os indico os quedará de vicio. Viene de uno que lo ha intado muchas, pero que muchas veces, creedme. ;)
PAN "BRIOCHE"
INGREDIENTES (para 4-6 personas)
- 220-250 gr de harina de trigo
- 120 ml. de leche entera o semidesnatada
- 60 gr. de mantequilla derretida
- 60 gr. de azúcar blanco
- 12 gr. (medio bloque) de levadura fresca de panadería
- 1 huevo L a temperatura ambiente
- 1 clara de huevo
- 1/2 cucharadita de sal
ELABORACIÓN:
1.- En primer lugar, calentar la leche hasta que alzance unos 45-50º C (vamos, hasta que la toquemos y esté caliente pero no queme). Este paso es importante para activar la levadura fresca. Deshacer la levadura y agregar a la leche junto con el azúcar. Dejar reposar hasta que veamos que la levadura sube a la superficie y se vuelve espumosa. Añadir la mantequilla derretida y el huevo y mezclar hasta que esté todo integrado.
2.- A continuación, mezclar en un bol grande la harina con la sal. Añadir la mezcla líquida que hemos preparado anteriormente. Con una espátula de madera, mezclar durante 2-3 minutos o hasta que tengamos todo integrado. En este punto veremos que la mezcla está muy pegajosa pero, no os preocupéis, esto se va a solucionar más tarde. Cubrir el bol con film transparente y dejar reposar la masa media hora en un lugar cálido.
La textura de la masa debe ser pegajosa pero firme |
*TIP: En este paso comenzaremos con 220 gr. de harina más o menos. Si vemos que la mezcla se queda excesivamente líquida al mezclar, añadiremos un poco más de harina hasta que adquiera la consistencia que podéis ver en la fotografía.
3.- Pasada media hora (veremos que la masa ha subido un poco), en el bol, amasar con las manos durante 2-3 minutos más. Veremos que la masa empieza a adquirir más consistencia y empieza a ponerse menos pegajosa. Cubrir de nuevo con film y volver a dejar reposar durante una hora hasta que haya doblado su tamaño. Volver a amasar sobre una superficie enharinada (con un poquito de harina basta. No añadimos mucha o nos quedará duro) durante 1 ó 2 minutos. Veremos que la masa ya está mucho menos pegajosa y más elástica.
4.- Cortar o dividir la masa en 6 trozos iguales. Estirar cada trozo hasta que tengamos un cilindro de unos 10-12 cm de largo. Doblar sobre sí mismo y pasar un extremo por el centro hasta hacer una especie de nudo con la masa (como podéis ver en la fotografía). Poner los bollos bastante juntos en una bandeja de horno y dejar reposar (otra vez, ya lo sé) durante una hora hasta que los bollitos hayan vuelto a doblar su volúmen y se hayan pegado unos con otros.
*TIP: Si véis que el paso de hacer los nudos resulta muy complicado (que no lo es) podéis formar bolitas de masa con cada uno de los trozos y, aunque no tendréis esa forma de nudo-trenza al final, el sabor será el mismo.
5.- Pintar con clara de huevo y hornear a 200º C (en un horno previamete precalentado unos 15 minutos) durante 20-22 minutos o hasta que el brioche está hecho y dorado por encima. Si queréis darle más brillo a la corteza, cuando falten un par de minutos para que termine la cocción, sacar un momento del horno y volver a pintar con clara de huevo. Meter de nuevo en el horno y hornear durante 1 ó 2 minutos más. Dejar reposar durante 10-15 minutos sobre una rejilla.
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Y ¡listo!, ya tenemos nuestro brioche. Puede parecer complicado, pero no lo es para nada. Si seguís los pasos que os describo aquí os quedará un pan de brioche muy, muy rico, en mi opinión, sin nada que envidiarle a otros que compramos. Por otro lado, este tipo de pan, al no ser muy dulce, es muy versátil ycombina muy bien con ingredientes dulces y salados. Yo lo tomo tanto para desayunar (partido por la mitad, tostado y con queso crema y mermelada está de muerte) como para cenar (con paté y hasta como pan de hamburguesa). Además, es una receta base para hacer otros tipos de receta, como mis rollos de canela (cinnamon rolls) que hago con esta masa y que compartiré con vosotros en un futuro no muy lejano.;)
A la hora de hornear podemos dar rienda suelta a nuestra mente creativa (que, en mi caso, no lo es tanto) y hacer todo tipo de formas: trendas, roscas, mini-panecillos, etc. o añadir azúcar por encima antes de meterlo al horno. Vamos, que esta es la base para hacer multitud de elaboraciones y podemos jugar con esta masa de mil maneras. Jugar en la cocina, claro está. ;)
Y hasta aquí la receta de hoy. Espero que os atreváis a hacerla porque os quedaréis impresionados de lo sencillo que es hacer un brioche desde cero en casa. Recordaros que podéis seguirme en la cuenta de Twitter @mediterraneaco donde estaréis al tanto de las últimas recetas publicadas.
Un saludo grande, hasta la próxima receta y... ¡¡BON APPÉTIT!! :D
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